En fin, en este momento parece ser que azota el viento, lo intuyo desde el interior de mi pezera, lo oigo, y quizás con un poco de suerte se lleve con él un poco de la mezquindad y la hipocresía que nos rodea.
Espero que sirvan de reflexión mis pequeños pensamientos y que poco a poco seamos capaces de prescindir de lo superfluo y aprovechemos a disfrutar de los pequeños momentos agradables que nos brinda la vida, digo pequeños porque vamos a tanta velocidad que apenas los podemos catar, pero, que en realidad son tantos que desaprovechamos parte de nuestras vidas intentando alcanzar lo que no vemos a pesar de tener tantas cosas y tanta gente alrededor con la que podemos disfrutar.
Deseo de todo corazón que estas fechas que se avecinan nos ayuden a tomar ciertas decisiones importantes en nuestras vidas que hagan que el próximo 2010 sea mucho más feliz y satisfactorio para todos, a pesar de la realidad de la crisis.