Ya ha transcurrido una semana y unas horas de esta toma, aproximadamente dos horas antes de nuestra separación forzosa, mis ojos en un continuo mar de lágrimas debido a la emoción y a la tristeza que me esperaba unas horas después con la dolorosa despedida, no obstante el pulso era firme ante tí, prueba de ello es esta toma dentro de tu mirada, el reflejo de mi cara, mi cámara, mis anillos, tu mano sujetando mis gafas y el fondo verde de Cantabria con los nubarrones de aquél domingo, sólo falta el fuerte bramido del viento que azotaba con fuerza y del cantábrico enbravezido.
En busca de la ignorancia
-
Definimos como ignorancia la falta de sabiduría, es decir, no saber,
carecer de conocimiento sobre algo concreto o sobre un todo. Y establecemos
grado...
Hace 7 años